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OFICINA DE TURISMO DE LOECHES

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Horario Oficina de Turismo de Loeches:
Lunes cerrado
Martes a Sábado de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 18:00
Domingos y festivos de 10:00 a 14:00

Teléfono: 91 885 17 78 (att. whatsapp 689 79 74 68 – mail turismo@loeches.es)

Visitas guiadas con guía oficinal municipal  a las 11:00, 12:30 y 16:30

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LOECHES

Un pasado cargado de historia, un presente lleno de vida.

“La madrugada me despertó entre encinas, olivos y pinos carracosos. Me puse el chaquetón de rocío que me ofrecía la mañana, y mientras se apagaban las últimas farolas, me adentré en las calles y plazas para tener un encuentro cara a cara con la vida. Por mi retina han pasado más años de los que puedo recordar, y aun así siempre salí victorioso del constante trueque mantenido con la historia, sobreviviendo a guerras, reyes y dueños, y custodiando hasta el día de hoy todo cuanto fueron dejando a su paso. Hoy, sólo los conejos, las perdices y cernícalos que anidan en el Monasterio de la Inmaculada Concepción parecen llevar aquí más tiempo que yo.

Por eso, para un viejo como yo, es motivo de inmensa alegría recibir tu visita. Llevo mucho tiempo esperándote, y será un verdadero placer acompañarte y compartir contigo las innumerables historias que atesoro en la memoria, guiarte orgulloso por las calles, plazas y monumentos, presentarte a mi gente y, por qué no, agasajarte con alguna pitanza que deje un buen recuerdo en tu paladar. Y ahora sígueme, te propongo un paseo por un pasado cargado de historia y un presente lleno de vida.”

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Algo de historia…

Los celtíberos sabían bien lo que se hacían cuando entre los siglos III y IV a.c. decidieron morar por estas tierras. Incluso los romanos, en su ambicioso plan de conquistar el mundo, me eligieron punto de paso de una de las muchas calzadas que componían la red viaria de su Imperio. Aunque no fue hasta el siglo XII, tras sucesivas conquistas del territorio por musulmanes y cristianos, cuando se habla de mi con el nombre de Lueches y perteneciendo a la Comunidad de Villa y Tierra de Alcalá de Henares.

Ya en el siglo XVI, Carlos I de España y V de Alemania me nombró Villa y poco después, su hijo, Felipe II me vendió para sufragar los gastos del Estado al genovés Baltasar Castaño quien, a su vez, me subastó; consiguiendo el señorío Don Íñigo de Cárdenas y Zapata y su esposa Doña Isabel de Avellaneda que me eligieron residencia de su casa, desde entonces me he codeado con los más importantes personajes de la Corte Real, que me proporcionarían un rico patrimonio arquitectónico y cultural.

En 1633 uno de los personajes más importantes que ha dado la historia de España se convirtió en mi nuevo señor, Don Gaspar de Guzmán, Conde-Duque de Olivares y valido del Rey, consiguiendo que el propio Felipe IV me visitara en varias ocasiones. Los descendientes de Olivares heredaran sus posesiones y me vincularan más tarde con la Casa de Alba.  Mantendré importancia y prestigio también durante el S.XIX, aun cuando se abolieran los señoríos jurisdiccionales, y ello gracias al auge y uso de los balnearios que aquí me construyeron.

La industrialización de la zona y el desarrollo del siglo XX me mantendrán como localidad estable, con una población creciente que es a la vez descendiente de las gentes que me construyeron con su trabajo y que son ahora los testigos de mi futuro y herederos de mi memoria.

OTRAS RUTAS

En una de mis zonas más elevadas de la villa se alza majestuoso la iglesia parroquial de Loeches, un hermoso ejemplo de construcción de estilo renacentista que data del siglo XVI, aunque la planta original se remonta al siglo XIII, cuando los cristianos repoblaron Loeches en la Edad Media.

En el Altar Mayor podemos hallar la lápida gótica que representa el Calvario de Nuestro Señor Jesucristo, datada en 1295 y que fue descubierta bajo el cemento de una de las paredes en una de las reformas realizadas el siglo pasado. A esta joya artística medieval de las más antiguas de la comunidad de Madrid la acompaña una talla de la Asunción de la Virgen, flanqueada a su vez por tallas de un grupo de angelotes realizados por diferentes talleres. Completan el templo la Capilla del Cristo y una imagen de la Virgen de Las Angustias, cuya festividad es el 12 de septiembre.

La Iglesia y el Convento de las Carmelitas construido por la familia de Cárdenas y Zapata en el año 1596 se articular alrededor de un claustro de planta cuadrada que alberga las diferentes dependencias: celdas, obrador, biblioteca, hospedería, huerto, etc.

El Monasterio de las Dominicas es imponente su amplio chapitel de pizarra se vislumbra en el horizonte como una de las señas de identidad de Loeches. Su concepción ejecutada por el arquitecto real Alonso Carbonell en el   S.XVII transformo todo el conjunto de la plaza, que en forma de “U” invertida enmarcaba el palacio del señor mediante las dos iglesias y los dos conventos laterales.

 

Al entrar en la Iglesia del Convento de la Inmaculada Concepción de las Madres Dominicas, en el lado derecho se encuentra una hermosa reja que daba paso al antiguo panteón del Conde Duque de Olivares. A principios del siglo XX, se anexionó el panteón de la Casa de Alba, cuya construcción fue costeada por la duquesa doña Rosario Falcó, e inaugurado por su hijo Jacobo Fitz-James Stuart, padre de Doña Cayetana.

Descendiendo por una escalera que arranca desde el panteón y desde el lateral derecho del pórtico de entrada de la iglesia de la Inmaculada Concepción alcanzamos el sótano donde se encuentra la cripta de enterramiento de la familia Olivares, un lapida moderna a modo de nicho vertical nominaliza los restos de los antepasados que allí reposan.

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